
Para ahorrar en la factura de luz, no es necesario alumbrarse con velas, ni lavar la ropa a mano. Existen otras estrategias que te pueden ayudar a pagar menos por la electricidad, sin renunciar a la comodidad de usar los electrodomésticos. Una de ellas, es ajustar la potencia contratada en tu suministro. Sigue leyendo y te contamos cómo hacerlo, para que no pagues de más en el recibo de luz.
¿Por qué es importante ajustar la potencia contratada?
Empecemos por explicar qué es la potencia contratada y porqué es importante no tener justo la que necesitas. Ni más, ni menos.
La potencia es la cantidad de electricidad que puedes utilizar al mismo tiempo en tu suministro eléctrico. Es decir, la potencia determina cuántos electrodomésticos puedes enchufar a la vez, sin que salte el diferencial y se vaya la luz.
Cuanta más potencia contratada tengas, más aparatos podrás utilizar de forma simultánea. Esto suena bien y podría parecer que cuánta más potencia, mejor. Pero hay un inconveniente: cuanta más potencia, más pagarás en tu factura de luz. ¿Y esto, por qué? Pues porque, a diferencia del consumo de energía, cuyo coste varía según la uses más o menos, la potencia es un coste fijo en el recibo eléctrico. Esto significa que pagas, tanto si la usas, como si no. Al reducirla, ahorrarás en la parte fija de tu factura. Por esta razón, es tan importante ajustar la potencia contratada y contratar solo la que realmente necesitas. Si tienes de más, pagarás por nada. Y eso, no es muy rentable.
¿Sabes cuánta potencia tienes contratada?
La forma más sencilla de saber cuánta potencia contratada tienes es mirar tu factura de luz. El apartado ‘Potencia contratada’ te indicará cuántos kW tienes para el periodo P1 y P3. Si te da pereza ponerte a rebuscar recibos, también puedes recurrir a una prueba más ‘casera’, que te dará una idea aproximada.
El truco es sencillo. Enciende, uno a uno, todos los electrodomésticos que tengas para ver hasta donde resiste tu instalación. La nevera y quizás el wifi siempre suelen estar encendidos. Así que sigue encendiendo aparatos: la televisión, las luces, la vitrocerámica, lavadora, lavavajillas, secadora, horno… Y así, con calefactores y equipos de aire acondicionado. Cuando salte la corriente, habrás llegado al límite de potencia que tu suministro puede pedirle a la red.
Si lo tienes casi todo encendido y la instalación resiste, tienes más potencia contratada de la que necesitas. Eso indica que hay margen para reducirla y ahorrar en tu factura de luz. Pero cuidado. Para no bajarla en exceso y llevarte luego una sorpresa desagradable, te recomendamos consultarlo con tu compañía de luz o con un experto. Si tienes dudas, en Escandinava de Electricidad te podemos aconsejar.
¿Cómo calcular la potencia que necesitas?
Para responder a esta cuestión, debes preguntarte cuántos equipos eléctricos tienes en casa y cómo los utilizas. Porque la potencia contratada no depende tanto del tamaño de tu hogar, sino de cuantos electrodomésticos tienes y del uso que les das. Puedes vivir en una casa muy grande, sin apenas aparatos eléctricos. O bien, en un piso pequeño, full equiped con todo tipo de gadgets y dispositivos. En el segundo caso, seguramente necesitarás más potencia que en el primero.
Pongamos un ejemplo. Si tienes horno, lavadora, secadora y aire acondicionado ¿cómo los usas? ¿los pones todos a la vez o de forma escalonada? De tu respuesta y tus hábitos de consumo eléctrico dependerá la cantidad de kW que vas a necesitar al mismo tiempo. Esa cantidad será la potencia que tendrás que contratar.
Para calcular cuánta potencia necesitas, puedes hacer un cálculo muy fácil. Suma el consumo en kW de los electrodomésticos de tu hogar y añade 1 KW más, en concepto de iluminación y otros dispositivos. A continuación, divide el resultado entre 3 (este es un pequeño truco que te ayudará a dar con la potencia adecuada). Aquí puedes ver cuántos kW consumen. aproximadamente, los aparatos eléctricos más comunes en un hogar.
Ahora compara la cifra que has obtenido, con la que tienes en tu factura. Si es inferior, estás de suerte. Tienes margen para ajustar la potencia contratada a la baja. Ten en cuenta que si bajas la potencia más de la cuenta, puedes encontrarte en la desagradable situación de que salte el diferencial cada vez que enciendas el horno y la plancha, a la vez. Además, si tienes que volver a subir la potencia, el coste que pagarás se comerá tu ahorro anterior.
¿Se puede contratar más de una potencia?
Con la entrada en vigor de la nueva estructura de peajes eléctricos el pasado junio de 2021, los suministros de hasta 15 kW pueden contratar dos potencias diferentes. Una para cada periodo horario: una para el periodo punta y otra para el periodo valle. Esto no es obligatorio y puedes seguir teniendo la misma potencia contratada todo el día. Pero sí es recomendable, porque nos puede ayudar a pagar menos en la factura de luz. La fórmula para ahorrar es tener una potencia más baja en el periodo punta (en el que el kW es más caro) y contratar más potencia para el periodo valle (el kW sale mucho más barato por la noche, los fines de semana y los festivos nacionales).
Si no recuerdas o no tienes claro cuáles son las franjas horarias de la tarifa con discriminación horaria de 3 periodos, las puedes consultar aquí.
¿Cómo puedo ajustar la potencia contratada y cuánto cuesta?
Ahora que ya sabes cómo calcular la potencia que necesitas, vamos a explicarte como puedes ajustarla. Y también cuánto cuesta hacerlo. Para reducir la potencia contratada debes solicitarlo a tu compañía de luz, que se encargará de hacer el trámite con tu distribuidora. La normativa actual, vigente entre junio de 2021 y hasta junio de 2022, permite hacer dos cambios de potencia al año, sin coste para el usuario.
En condiciones normales o si ya se han realizado los cambios gratuitos permitidos, hay que pagar tanto para subir, como para bajar la potencia. El coste de reducir la potencia es de 10,94€, independientemente de los kW que bajes. Subir la potencia cuesta unos 45 € por kW.
Te ayudamos a ajustar la potencia contratada
Si necesitas consejo para ajustar la potencia contratada de tu casa o tu empresa, en Escandinava de Electricidad te asesoramos. Además, te podemos recomendar una tarifa de luzque con la que ahorrar en tu factura sea muy sencillo. Llámanos gratis al 900 373 681 o deja tus datos en nuestro formulario de contacto y te llamamos nosotros.